La satisfacción sin restricciones de todas nuestras necesidades se presenta como el método mas atractivo de llevar nuestras vidas, pero significa anteponer el placer a la prudencia, y esto trae consigo su propio castigo.
Sigmund Freud
Creía que se suponía que tenía que disfrutar de cada minuto. También creía que si quería algo lo debía tener. Tenía que evitar el dolor. Hoy sé que el dolor de comer compulsivamente es peor que cualquier problema al que me pueda tener que enfrentar.
Sé, también, que es fácil olvidar ese dolor. Aunque mi vida sea mejor de lo que ha sido nunca, necesito un recordatorio diario de que la abstinencia es la cosa más importante de mi vida. He pagado mis deudas como un comedor compulsivo. Gracias a Dios, estoy aquí en OA. No quiero volver nunca al lugar de donde vengo.
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